¿Por qué con el frío se nos antoja el pan y las bebidas calientes?

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Con la llegada del invierno, el deseo por consumir pan, café y chocolate caliente se intensifica, y la explicación tiene un origen evolutivo. Una investigación publicada en una revista científica explica que, cuando baja la temperatura, el cuerpo utiliza sus reservas de grasa para mantener la temperatura interna. Esto provoca que busquemos alimentos ricos en carbohidratos y grasas, como panes o dulces, para reponer la energía gastada. Además, estos alimentos y bebidas estimulan la liberación de serotonina y dopamina, neurotransmisores que generan bienestar y confort. El estudio también señala que acompañar estos alimentos con café o chocolate caliente refuerza esa sensación placentera, aunque se recomienda moderación para mantener el equilibrio en la salud. Un análisis realizado por la Universidad de Indiana sugiere que el chocolate preparado con cacao y leche descremada es una alternativa más saludable. Así, la ciencia confirma que el antojo de pan y bebidas calientes en invierno no es solo costumbre, sino una respuesta natural de nuestro organismo al frío.

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