El francés Ousmane Dembélé fue reconocido como el mejor jugador del mundo al recibir el Balón de Oro 2025, un galardón que le entregó el brasileño Ronaldinho. Su temporada con el Paris Saint-Germain (PSG) estuvo llena de títulos, récords y momentos decisivos que lo colocaron por encima de figuras emergentes como Lamine Yamal.
Títulos que marcaron la diferencia
El PSG conquistó cinco campeonatos en la campaña 2024-2025: Ligue 1, Copa y Supercopa de Francia, Champions League y Supercopa de Europa. Dembélé resultó determinante en cada torneo, confirmando su peso en el éxito colectivo.
Una campaña de cifras extraordinarias
El delantero francés cerró el año con 35 goles y 16 asistencias, registros que lo situaron como uno de los jugadores más influyentes en el fútbol europeo.
Protagonismo constante en todas las competencias
Más allá de los grandes escenarios, Dembélé mantuvo un nivel regular tanto en torneos nacionales como en la máxima competición continental, sin bajar su rendimiento a lo largo de la temporada.
Superioridad frente a sus rivales
Aunque Lamine Yamal y otros nominados tuvieron actuaciones notables, ninguno igualó el impacto colectivo y las estadísticas de Dembélé, factores que inclinaron la votación a su favor.
Regreso al máximo nivel
A sus 28 años, Dembélé mostró la mejor versión de su carrera. Su liderazgo y consistencia devolvieron al PSG la ambición de conquistar Europa, convirtiéndolo en el merecido Balón de Oro 2025.