Soñar con fallecidos
Soñar con familiares o amigos que ya murieron es más común de lo que parece y, según la psicología, no se trata de un fenómeno sobrenatural, sino de un proceso natural del duelo. Estos sueños suelen aparecer cuando existen emociones intensas, asuntos no resueltos o vínculos muy fuertes con la persona fallecida. Funcionan como un espacio simbólico en el que la mente procesa la ausencia, especialmente en etapas tempranas del duelo o en momentos de gran carga emocional.
Factores como el estrés, la culpa o incluso alteraciones del sueño pueden incrementar la frecuencia de estas experiencias oníricas. Cuando generan angustia, especialistas recomiendan llevar un diario de sueños, acudir a terapia psicológica y realizar rituales de despedida que ayuden a cerrar ciclos. En México, donde el Día de Muertos refleja la conexión cultural con quienes partieron, estos sueños no se entienden como mensajes del más allá, sino como una forma de adaptación emocional que permite mantener vivos los recuerdos mientras la mente asimila la pérdida.