Flossie, una gata que acaba de cumplir 30 años, ha sido reconocida como la gata viva más vieja del mundo, una edad extraordinaria para un felino. Su historia se volvió viral gracias a un video donde se le ve disfrutando de mimos, tranquilidad y cuidados junto a su familia durante la celebración de su cumpleaños.
Sus dueños aseguran que Flossie ha llevado una vida relajada, con buena alimentación, atención veterinaria y mucho cariño, factores que consideran clave para que haya alcanzado una longevidad tan poco común.
La historia de Flossie ha tocado corazones en redes sociales, donde usuarios destacan que su caso es un recordatorio de que el amor y los cuidados pueden marcar la diferencia en la vida de nuestras mascotas, permitiéndoles acompañarnos por muchos años más.