Astronautas chinos se aventaron una carnita asada espacial en la Estación Tiangong para recibir a la tripulación de la Nave Shenzhou-21.

Prepararon alitas de pollo en una parrilla y también unos filetes, marinados y sazonados con anticipación.

Este manjar no solo celebró la llegada del nuevo relevo, sino que reunió a ambas tripulaciones en un momento de convivencia en órbita