¡No te acabes, internet! Y es que a través de la red hemos podido conocer las historias más divertidas, así como los acontecimientos más bizarros al alcance de un clik. Pero en esta ocasión, la historia que te vamos a presentar sin duda te tocará el corazón, por la gran lección de vida que nos regala el protagonista. Se trata de Misac de la Rocha, un joven de 17 años, oriundo del municipio de Victoria, Durango, quien se viralizó luego de dar a conocer a través de sus redes sociales que se alquila para formarse por las personas en las filas de dependencias gubernamentales, bancos, centros comerciales, etc., a cambio de una cuota de 60 pesos por hora, dinero que destinará para poder continuar con sus estudios.
Fue a través de Facebook, que Misac compartió: “Me alquilo para hacer fila en cualquier lugar (…) bancos, boletos de entretenimiento, centros multipagos, a las 7 am en cualquier lugar, 60 pesos la hora”.
Por su puesto que esta acción fue aplaudida por diversos internautas, quienes felicitaron la iniciativa del joven al fin de alcanzar su objetivo: seguir estudiando.
Y es que Misac, convirtió su necesidad de adquirir dinero en un empleo poco o nada común. En las fotografías también compartidas en sus redes sociales, se observa a Misac haciendo fila por uno de sus ‘clientes’, en alguna dependencia de la zona Centro de Durango. De esta manera, él consigue recaudar fondos en tanto otorga tiempo a una persona con ocupaciones que no pueda permanecer formado para realizar algún trámite
“Hago fila en cualquier lugar que se me indique, 60 pesos la hora a cualquier lugar”, publicó en sus redes.
Misac ha logrado completar 20 alquileres
Misac también compartió en sus redes sociales, que luego de viralizarse en internet, diversas personas solicitaron sus servicios, y aseguró que “tenemos más de 20 alquileres completados y apoyando a personas que lo necesitan, por ejemplo, en centro multipagos, SAT, IMSS, bancos, etc.”.
Hasta el momento, se desconoce si Misac ya logró recaudar los recursos necesarios para sus útiles escolares, y a pesar de que ha otorgado entrevistas a medios locales, tampoco se ha animado a especificar si este negocio le ha sido redituable. Cómo sea, la acción se merece nuestros aplausos, porque una vez más quedó demostrado que cuando se quiere, se puede. ¡Muy bien por ti, Misac!
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