Un misterio del Triángulo de las Bermudas fue analizado por científicos a través de grabaciones de una estación sísmica cercana a la isla, lo que permitió identificar una estructura geológica que no tiene comparación con ninguna otra parte del planeta.
El estudio, publicado en Geophysical Research Letters, se enfocó en el comportamiento de ondas sísmicas generadas por terremotos al desplazarse bajo esta zona del Atlántico.
Los registros mostraron que las ondas cambian su trayectoria al atravesar una masa rocosa ubicada a unos 50 kilómetros de profundidad, lo que llevó a identificar una capa adicional de roca entre la corteza oceánica y el manto terrestre, con un espesor aproximado de 20 kilómetros.
Una capa rocosa única sostiene el Triángulo de las Bermudas desde el subsuelo
De acuerdo con el análisis, esta estructura presenta una densidad ligeramente menor al material que la rodea, lo que permite que funcione como un soporte natural. Esta configuración geológica actúa como una especie de plataforma que mantiene elevada la región del Triángulo de las Bermudas hasta unos 500 metros sobre el nivel del mar.
La investigación sugiere que esta formación se originó tras una erupción volcánica ocurrida hace aproximadamente 31 millones de años, cuando roca fundida emergió desde capas profundas del manto, se enfrió gradualmente y quedó atrapada en la corteza, creando una base sólida y estable.
Actividad volcánica profunda y magnetismo alterado detrás del misterio en el Triángulo de las Bermudas
El estudio plantea que el misterio del Triángulo de las Bermudas está relacionado con material proveniente de la zona de transición del manto terrestre, ubicada entre 400 y 600 kilómetros de profundidad, algo nunca antes documentado en la formación de una isla oceánica.
Esta composición química inusual, rica en minerales con agua y elementos volátiles, explicaría por qué las ondas sísmicas y el campo magnético se comportan de forma irregular en la zona. Estas alteraciones físicas han sido registradas durante décadas y están asociadas con fallas en instrumentos de navegación.
Aunque el misterio del Triángulo de las Bermudas ha sido vinculado históricamente con desapariciones inexplicables, el estudio se concentró únicamente en los procesos geológicos que dieron origen a esta región. Los hallazgos refuerzan la idea de que se trata de una anomalía natural extremadamente rara, capaz de modificar el entorno físico sin recurrir a explicaciones sobrenaturales.
Por lo que, este avance científico ofrece una nueva perspectiva sobre una de las zonas más enigmáticas del planeta, basada en evidencia sísmica y geológica sin precedentes.
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