El rescate que unió a todo Guadalupe
El rescate del bebé pecarí en Guadalupe, Nuevo León, se convirtió en una muestra clara de trabajo en equipo entre autoridades y comunidad. Todo comenzó cuando vecinos de la colonia Contry La Silla 8º Sector escucharon ruidos provenientes de una alcantarilla y descubrieron a la cría atrapada. De inmediato avisaron a la Guardia Forestal de Parques y Vida Silvestre, así como a Protección Civil de Nuevo León, quienes llegaron al sitio para iniciar el operativo.
El pecarí, localizado en la zona de Renacimiento y Greco, fue sacado con cuidado del drenaje y trasladado a una revisión veterinaria para asegurar que no presentara lesiones. Tras confirmarse que estaba en buen estado, comenzó la parte más delicada: encontrar a su manada, pues un ejemplar tan joven depende por completo de su familia para sobrevivir en libertad.
Los Rangers de la Guardia Forestal recorrieron amplias áreas cercanas, acompañados por vecinas y vecinos que conocen bien el paso de fauna silvestre en la zona. La búsqueda se extendió hasta la madrugada, cuando alrededor de la 1:30 a.m. finalmente localizaron a la familia. El reencuentro fue inmediato: la madre reconoció al pequeño y la manada lo reintegró sin problemas antes de continuar su camino rumbo al bosque en el Cerro de la Silla.
Además de representar un rescate exitoso, el caso refuerza el compromiso de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León por proteger a los animales que habitan en zonas urbanas. Las autoridades reiteraron que seguirán trabajando en la conservación, convivencia respetuosa y atención de reportes ciudadanos para salvaguardar la fauna silvestre del estado.












