Este domingo se registró un tiroteo en la playa Bondi de Sídney, Australia, el cual dejó al menos 16 personas muertas y al menos 29 heridas.
El lugar estaba abarrotado pues miles de personas celebraban el inicio de una festividad judía.
El primer ministro australiano, Chris Minns, afirmó que el ataque estaba dirigido a los integrantes de esta comunidad. Se sabe que en el lugar murió uno de los atacantes y otro está detenido, se habla de que son padre e hijo.
Las autoridades continúan las investigaciones.