Familiares de reclusos se manifestaron en las inmediaciones del Cereso de San Miguel; por lo que el camino al Batán, con dirección al Periférico Ecológico, quedó bloqueado.
De acuerdo con los manifestantes, al interior del penal operan mandos que permiten cobros indebidos, presuntas torturas, extorsiones y la renta de teléfonos celulares a los internos.












