Consumir carne que no cuenta con revisión sanitaria ni aval de un rastro autorizado representa un riesgo para la salud.

Médicos advierten que puede provocar infecciones graves, por lo que se recomienda estar atentos a cualquier síntoma tras su ingesta.

Una carne en mal estado suele presentar textura babosa, color oscuro, olor fuerte y hueso verdoso.

En Puebla, vender carne sin documentación sanitaria puede derivar en sanciones que van de los 84 mil a los 90 mil pesos, además del decomiso del producto, clausura del negocio y posibles consecuencias legales.