Para el cierre del calendario astronómico de este 2025, llega la lluvia de estrellas Úrsidas, un fenómeno discreto, pero atractivo para observadores pacientes que buscan despedir diciembre mirando al cielo desde Puebla.
Este evento ocurre cada año cuando la Tierra atraviesa los restos del cometa 8P/Tuttle, lo que provoca destellos luminosos visibles a simple vista durante la madrugada.
A diferencia de otras lluvias más intensas, las Úrsidas destacan por su constancia y por presentarse en una época con noches largas, lo que favorece la observación en distintas regiones del país, incluido el estado de Puebla.
¿Cuándo observar la lluvia de estrellas Úrsidas en Puebla este 2025?
La lluvia de estrellas estará activa del 17 al 26 de diciembre, con su punto máximo entre la noche del domingo 21 y la madrugada del lunes 22.
Las mejores condiciones se presentarán después de la medianoche y especialmente antes del amanecer , alrededor de las 5:00 horas, tiempo del centro de México.
Durante este periodo, se espera una tasa promedio de entre cinco y diez meteoros por hora, aunque en años anteriores se han registrado aumentos repentinos de actividad bajo condiciones ideales.
Condiciones del cielo y clima en Puebla para la lluvia de estrellas Úrsidas
Uno de los factores que favorecerá la lluvia de estrellas Úrsidas en Puebla este 2025 será la fase lunar.
La Luna estará en una etapa creciente muy delgada, con apenas alrededor del tres por ciento de iluminación, lo que permitirá cielos más oscuros y mejor visibilidad de los meteoros más tenues.
Sin embargo, el clima será un elemento a considerar. La influencia del vórtice polar y de frentes fríos en diciembre provocará madrugadas gélidas, sobre todo en zonas altas del estado, por lo que se recomienda abrigarse adecuadamente.
Recomendaciones para disfrutar la lluvia de estrellas Úrsidas en Puebla
Para apreciar la lluvia de estrellas Úrsidas en Puebla este 2025, lo ideal es alejarse de la contaminación lumínica de las ciudades y buscar espacios rurales o de montaña. No se requiere equipo especializado, ya que la observación a simple vista ofrece un campo visual más amplio.
El radiante de este fenómeno se localiza en la constelación de la Osa Menor, cerca de la Estrella Polar, lo que facilita su localización durante la noche. Con paciencia y preparación, este evento se convierte en una oportunidad perfecta para cerrar el año bajo el cielo nocturno poblano.
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