Durante esta semana se volvió viral “hablar con aliens”, gracias a que una supuesta médium, Mafe Walker, aseguró saber comunicarse con ellos mediante las frecuencias galácticas que fluyen por su cuerpo. Algo así. Con esto en mente, me pareció pertinente recomendar para hoy una película que no sólo construye un argumento más sólido sobre las conversaciones con extraterrestres, sino que presenta una reflexión bastante importante todavía, sobre las complicaciones que tenemos como sociedad para ponernos de acuerdo y enfocarnos en un solo objetivo, aún a sabiendas de que la extinción nos pisa los talones. Estoy hablando de la cinta Arrival, 2016, de Denis Villeneuve.
Una historia en la que una lingüista puede salvar al mundo
Arrival cuenta la historia de Louis Banks (Amy Addams), una lingüista que, bajo la encomienda del gobierno de Estados Unidos, debe descifrar el lenguaje de una raza de alienígenas que llegó a la Tierra. Mientras ella cumple esta tarea, otras 11 naves aterrizaron a lo largo del mundo, para que cada país probara sus métodos para entablar el diálogo con los extraterrestres. Al final, el centro del mensaje se vuelve claro cuando el principal reto para comprender a los visitantes, más allá de las barreras del lenguaje, son las diferencias, miedos y reacciones de la humanidad en general.
Esta historia se construye mientras que el director nos presenta, por partes, escenas de lo que parece ser un pasado trauma de la protagonista, sin embargo, una sinergia maravillosa de imagen, sonido y montaje, llevan al espectador a entender cómo el director juega con nuestras mentes, recompensando nuestra paciencia con una de las sorpresas más impactantes que he visto en la Ciencia Ficción (y mira que tenemos el “yo soy tu padre” en la categoría). Un guion en espiral que presenta una de las mejores cintas del género que he visto en mi vida.
La cosa no es de hablar: es mirar.
Creo que la esencia de la película puede resumirse en uno de los diálogos de la protagonista: “saber mirar es saber amar”. Ahí es donde, creo, la queridísima Mafe Malker comete su principal error: comunicarnos con los seres extraterrestres, extraños, más allá de en la traducción de frecuencias galácticas, consta en encontrarnos en un idioma universal, la mirada. En un contexto como en el que vivimos, que del otro lado del mundo vemos una guerra que amenaza con convertirse en uno de los conflictos globales más grandes de la historia, a un país más polarizado que nunca, como el que habitamos, creo que hablar con cualquier otra persona es hablar con un alienígena. Eso es hablar entre otredades, entre extraños que no nos vemos más allá del reflejo de nuestras propias palabras. Y por eso la mirada que propone Arrival es tan presente, incluso a 6 años de su estreno, cuando lo que nos hace falta es traducirnos entre nosotros.
La medium colombiana cobra al rededor de 1,500 pesos para conectarse con estos seres de otros planetas. Yo te invito a ver Arrival, aunque ya la hayas visto. Volver a verla y después discutirla con alguien.
La película puede verse en la plataforma de streaming Paramount+.
Éric Hauvery Cetina Karsten
@ehauvery
