Su esposa, Emma Heming-Willis, confirmó que la familia ya se prepara para su muerte y tomó una decisión muy dolorosa: donar su cerebro a la ciencia para apoyar la investigación sobre esta enfermedad neurodegenerativa, que no tiene cura. La familia quiere que Bruce tenga una despedida digna y busca facilitar el proceso para sus hijas una vez que él ya no esté.