México hizo historia en el Mundial Sub-17 Femenil al quedarse con el tercer lugar tras vencer a Brasil en una intensa tanda de penales.
El encuentro se definió en los últimos minutos con un autogol que empató el marcador y envió el partido a la serie decisiva. Ahí, la portera mexicana Valentina Murrieta se convirtió en la heroína al detener dos penales y asegurar la victoria del conjunto Azteca.
Con este resultado, la Selección Mexicana logra su mejor participación en la categoría y confirma el gran momento que vive el futbol femenil nacional.