La llama olímpica inicia su viaje histórico rumbo a Milán-Cortina 2026

La llama olímpica inició su recorrido rumbo a los Juegos Olímpicos de Invierno de Milán Cortina 2026 en medio de condiciones inusuales que obligaron a modificar la tradición. El fuerte mal tiempo en el oeste de Grecia impidió realizar la ceremonia de encendido en el histórico estadio de Olimpia, por lo que los organizadores tuvieron que moverla al interior de un museo cercano. Debido al cielo completamente nublado, tampoco fue posible encender la antorcha con los rayos del sol mediante el espejo cóncavo, como indica la tradición, por lo que se utilizó una llama de respaldo preparada un día antes durante un breve momento de sol.

A pesar del cambio de escenario, la ceremonia mantuvo elementos tradicionales: sacerdotisas, danzas rituales, invocaciones en griego y la presencia simbólica de las estatuas del museo, lo que dio un toque diferente pero igualmente solemne al ritual. La presidenta del COI, Kirsty Coventry, destacó la emoción del momento y cómo el pasado y el presente se unen a través de este encendido. El relevo comenzó con el remero griego Petros Gaidatzis, quien dio inicio al recorrido que llevará la antorcha a Italia.

Una vez en territorio italiano, la llama será trasladada por 10 mil corredores a lo largo de 63 días y 12 mil kilómetros, pasando por 110 provincias, 60 ciudades, 300 pueblos, 20 regiones y todos los sitios UNESCO del país. Milán Cortina 2026 traerá consigo grandes expectativas: 116 eventos con medallas, mayor participación femenina, el regreso de jugadores de la NHL y el debut del esquí de montaña en el programa olímpico.

Además, se encenderá una llama separada para los Juegos Paralímpicos, programada para el 24 de febrero en el Hospital Stoke Mandeville, Inglaterra. En la ceremonia también se recordó la importancia de la Tregua Olímpica en un mundo marcado por conflictos actuales. Aunque las condiciones climáticas alteraron la tradición, el espíritu olímpico prevaleció, destacando los valores históricos y culturales que representa esta llama que ahora viaja hacia su destino final.